Desde hace meses vengo pensando en la posibilidad de escribir acerca de mi relación actual con el rock local. Sí, el rock dominicano y yo tenemos ciertas situaciones... ciertas diferencias que causan fricción entre nosotros y no permiten que podamos sobrevivir y convivir en paz estando cerca uno del otro. Hablando con Orlando, colega y bajista de la banda local Synesthesia, decidí poner manos a la obra y mostrarle al mundo (yeah, right!) mi relación actual con el rock dominicano y el por qué de las desavenecias y desacuerdos existentes entre la escena de rock y yo. Por qué este post está dividido en dos? Simple. Mi relación directa con el rock local tiene dos vertientes: - Laboral, que tiene que ver directamente con la relación desde mi oficina en MessengerMag
- Personal, entre el rock y yo de frente.
Hoy vamos a tratar el aspecto laboral.
El rock local, mi trabajo y yo
Todos lo saben. Trabajo en Messenger Mag. Una revista para jóvenes en edades entre 14 y 24 años, estudiantes de bachillerato y primer año de la Universidad. Uno de los principales objetivos de Messenger Mag es promover los logros, valores y virtudes de la juventud dominicana, así como promover y colaborar con el desarrollo del talento de estos jóvenes.
Dónde reside la desavencia del rock local conmigo en este aspecto?
Pues sucede que a los diferentes protagonistas del rock local les "molesta" la revista. No la revista propiamente dicho, sino el público al que está dirigida. Esto por si solo no representa ningún tipo de inconveniente; somos un país libre y democrático, en donde cada quien se encuentra en total derecho a decidir lo que le gusta y lo que no le gusta. Luego, estos mismos rockeros deciden llevar a cabo el famoso arte tan practicado por ellos de "Dar tijera". Me explico:
1. "Messenger Mag, la revistica esa pa' chamaquitos" 2. "Gran cosa, dique Messenger Mag" 3. "Esa revistica e' una mierda pa' carajitos del Carol Morgan" 4. Etc, etc, etc.
Todavía en este punto no tengo mayores inconvenientes. Sigo con la teoría de cada quien puede pensar lo que desee. El problema comienza cuando estos rockeros, que se llenan la boca de malas expresiones y críticas que no sirven acerca de mi revista deciden bombardearme solicitandome, nada más y nada menos, que los entrevistemos y le cubramos sus conciertos.
Yo feliz. Con todo el placer del mundo entrevisto bandas, promociono conciertos en la página, publico lanzamientos, notas de prensa y todo lo demás, porque creo firmemente que el rock local necesita que la prensa se acuerde más de ellos, y yo hago lo mio desde el medio que dirijo.
Pero, a pesar de que no tengo inconvenientes en mostrar mi apoyo 100% a las bandas, no puedo negar que, en lo personal, a veces me siento ofendida. Por qué? Las bandas saben que cuentan conmigo. Tengo por lo menos un amigo o conocido en casi todas las bandas de este país, ellos saben que la promo que les damos en Messenger Mag es de corazón y a ellos les hace falta, y aun así echan tierra sin piedad sobre mi producto.
Entienden mi punto?
Pasa lo mismo con el Messenger Mag Music Fest. Primera vez que en este país se hace un evento de este tipo. Un evento en el que las bandas nuevas pueden comenzar a hacer su carrera, ponerse las pilas, ensayar, tocar en un escenario en el que no saben si podrán tocar de nuevo con una producción que no tiene nada que envidiarle a eventos internacionales... pero mis adorados (sin ironía) rockeros sólo ven "que eso esta lleno de bandas de colegios"... claro que está lleno de bandas de colegios! Ese es mi público principal!
A lo que quiero llegar (y para terminar porque el post se ha puesto largo), es que a veces pienso que las bandas se entierran ellas mismas el cuchillo. Si pasamos lista, por Messenger Mag han desfilado, ya sea con entrevistas o reportajes:
- Marel Alemany
- Paola Moreno
- TKR
- Entrenos
- Mashron
- Futuros Divorciados
- Nux
- Plasma
- Nelson Poket
- Zoom
- Grados Celsius
- The Chinese Calendar
- Nine Circus
- Octiembre
- Aptsonance
- Teriyaki
Un total de 16 bandas locales en sólo 26 ediciones. A eso súmenle todos los conciertos que se realizan todas las semanas, en donde siempre hay alguien de Messenger Mag tomando fotos que luego suben al portal y se publican en la revista, y, obviamente, el Messenger Mag Music Fest, un evento que cada año reune decenas de bandas locales que quieren echar pa'lante con un premio que nunca antes se había otorgado en ningun festival de rock local.
Me di a entender?
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no mordereis la mano que les da de comer... muy malo de parte de ellos...